El ouadaa - al wadaa - wedaa - Cauris - cauri- cyprée - cuidado facial - الودعة

Desde antes de nuestra era, estos caracoles sirvieron como medio de pago y su posesión constituía un signo tangible de prosperidad y poder. Estos pequeños caracoles blancos típicos muy conocidos en África, en particular en Marruecos, Argelia pero también en Senegal, llamados en árabe "weda'a", permiten preparar un cuidado tradicional casero destinado a tratar diversos problemas de piel localizados especialmente en el rostro: puntos negros, manchas pigmentarias, granos, tez apagada, "máscara del embarazo" (más conocido como "cloasma") ... Se trata de un antiguo remedio oriental de abuela que resulta muy eficaz. - Para usarlos: basta con colocarlos en un frasco de vidrio (que se cierre) y cubrirlos con un poco de jugo de limón fresco y luego dejarlos macerar durante una noche generalmente, obtendrás una crema natural blanca más o menos líquida (te aconsejamos enjuagar los caracoles y secarlos con un paño limpio antes de usarlos). Esta crema tratante se aplica ya sea en todo el rostro o en las zonas con problemas e imperfecciones: esta mezcla permite unificar el tono aportando un efecto aclarador gracias al limón, tener una piel más limpia y más lisa eliminando granos pasajeros, manchas y cicatrices. Si quieres hacer una mascarilla completa o solo aplicarla en ciertas zonas, necesitas macerar un caracol grande o dos pequeños. Según el número de caracoles necesarios para un cuidado, con 10 caracoles puedes hacer un tratamiento de 5 a 10 mascarillas, también puedes hacer solo una al mes. Generalmente en caso de problemas de piel difíciles de tratar, se aconseja hacer una o dos mascarillas por semana y preferiblemente por la noche. En cuanto a las manchas, comienzan a desaparecer con el tiempo a lo largo de las aplicaciones. Tan pronto como sientas que tu piel ha absorbido la crema obtenida, enjuaga tu piel con agua tibia y luego con agua fría. - Gracias al poder ácido del limón, esta mezcla permite realizar un "peeling" natural para renovar la piel. Es normal que el limón pique ligeramente durante la mascarilla pero si esto no es soportable para tu piel no dudes en enjuagarla inmediatamente.

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